Serie del Caribe 2026 cambia de sede y se celebrará en México
La decisión busca garantizar la participación de las principales ligas del Caribe y preservar la competitividad del torneo, que se celebrará en febrero


La Serie del Caribe 2026 no se celebrará en Caracas, como estaba previsto inicialmente, y será trasladada a México, según confirmaron fuentes vinculadas al organismo rector del torneo y a las ligas participantes. La decisión responde a la imposibilidad de garantizar la participación plena de varias ligas caribeñas bajo el escenario originalmente planteado.
El cambio de sede surge luego de que ligas como la de Puerto Rico, República Dominicana y México expresaran formalmente que no asistirían a una Serie del Caribe celebrada en Venezuela, lo que comprometía la viabilidad deportiva y competitiva del evento. Ante ese panorama, la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe optó por relocalizar el torneo para preservar su formato tradicional y asegurar la presencia de sus principales protagonistas.
México asumirá la organización del clásico caribeño y la sede seleccionada será Guadalajara, con partidos programados en el Estadio Panamericano de Zapopan. El evento se mantendría en la ventana habitual de febrero de 2026, alineado con el cierre de las ligas invernales del área.
Esta edición tendrá como particularidad la participación de dos equipos mexicanos, correspondientes a los finalistas de la temporada de la Liga Mexicana del Pacífico, junto a los campeones de Puerto Rico y República Dominicana, además de un país invitado que será anunciado posteriormente.
Para el béisbol caribeño, la decisión busca evitar un torneo incompleto o con ausencias de peso, protegiendo el valor histórico, comercial y competitivo de la Serie del Caribe, que se ha consolidado como uno de los principales escaparates del béisbol profesional de invierno.
En el caso de Puerto Rico, el traslado garantiza la participación de su equipo campeón en un entorno considerado logísticamente viable, manteniendo el compromiso con el torneo y con la fanaticada boricua que sigue de cerca el desempeño de sus novenas en el escenario internacional.
La Confederación y la liga anfitriona trabajan ahora en la planificación operativa del evento, incluyendo calendario oficial, aspectos de transmisión y detalles relacionados a la venta de boletos, de cara a una edición que llega marcada por decisiones institucionales de alto impacto.





