Trump nombra un enviado especial para Groenlandia para convertirla "en parte de EE.UU."
El mandatario estadounidense ha reiterado en varias ocasiones en los últimos meses su interés por "hacerse" con el territorio autónomo danés

El presidente estadounidense, Donald Trump (c), junto al gobernador de Luisiana Jeff Landry (d), recién nombrado enviado especial para Groenlandia, durante un acto el 24 de marzo de 2025 en la sala Roosevelt de la Casa Blanca en Washington. Foto: Samuel Corum

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha nombrado como enviado especial para Groenlandia al gobernador del estado de Luisiana, Jeff Landry, quien dijo que su cometido será convertir a ese territorio autónomo de Dinamarca "en parte de EE.UU.".
En un mensaje publicado a última hora de este domingo -hora local de Washington- en su red Truth social, Trump anunció la designación de Landry, un excongresista que es gobernador de Luisiana desde 2024, como "enviado especial de Estados Unidos para Groenlandia".
"Jeff entiende lo esencial que es Groenlandia para nuestra seguridad nacional, e impulsará rotundamente los intereses de nuestro país por la seguridad y supervivencia de nuestros aliados y, de hecho, del mundo. ¡Felicidades, Jeff!", añadió Trump en su mensaje.
En otro mensaje en X, Landry aclaró que compatibilizará ese "cargo voluntario" con el de gobernador de Luisiana, y dijo que su misión será "convertir a Groenlandia en parte de EE.UU.".
El mandatario estadounidense ha reiterado en varias ocasiones en los últimos meses su interés por "hacerse" con el territorio autónomo danés de Groenlandia por motivos de seguridad nacional, dentro de un afán expansionista que se extiende también a Canadá y al canal de Panamá.
La Casa Blanca llegó a recopilar este año estimaciones de cuánto le costaría adquirir y administrar Groenlandia, además de los ingresos que implicaría la explotación de sus recursos naturales, principalmente los minerales, según informó en abril el diario The Washington Post.
Trump dijo incluso a principios de año que no descartaba el uso de la fuerza para anexionar la isla, de 57.000 habitantes y que es clave para la navegación en torno a la región ártica.
Tanto las autoridades de la isla, que goza de derecho de autodeterminación desde 2009, como las de Dinamarca y la Unión Europea (UE) han rechazado las pretensiones expansionistas de Trump.
No obstante, también han mostrado su voluntad de cooperar en la defensa de la isla, que posee una base estadounidense, fruto de un acuerdo firmado hace siete décadas entre Copenhague y Washington.





